martes, 10 de agosto de 2010

Las Medallas de los artistas.


Ptolomeo Primo. Creator Museiom.
Pintura alla Prima
sobre placa de yeso.
Medidas: las de la Hoja Nro: 3
de la Carpeta Rivadavia.
Autor: BB
Apuntes para una Teoría del Museo:
Los historiadores de la Medalla coinciden en que en el Imperio Romano,las monedas, acuñadas en el Templo de Juno Moneta, eran de curso ordinario y las medallas de curso extraordinario. ¿Qué quiere decir esto?: que las monedas circulaban siempre y las medallas eran acuñadas para eventos especiales por los poderosos, los cuales las tiraban al populacho, o al aluvión zoológico, o a la plebe, o a el pueblo llano, o a la negrada, o a la clase trabajadora, según sea la manifiesta tendencia ideológica
del Señor Lector. En esas medallas aparecía la efigie del donante, normalmente un Garca de lo peor, y valían por el metálico precioso o semiprecioso que pesaba, la imagen del Garca no les agregaba nada. Esas “monedas” especiales servían también para pagar el valor de los soldados, valor con valor se paga y por extensión, con medallas se pagaron miles de actos distinguidos, precisamente con medallas. En
el Arte se han dado medallas desde antiguo, los Salones y Bienales dieron siempre medallas hasta que, por no tener presupuesto para comprar metálico precioso, no haber quien modele bien una medalla o ser estéticamente incorrecto marcar una competencia con un símil moneda, o sea con Oro, ya no se entregaron más. Incluso los artistas “a la mode” ven grasa eso de andar repartiendo medallas y diplomas
como si del Cuadro de Honor se tratara. Ahora, si reparten oro contante y sonante, dólares o euros, no hay problema con esos pruritos de artistas mantenidos, pero que no se note. A mí me tocó el reino de la Medalla y si me pongo todas parezco un General latinoamericano en el Día de la Patria. La Medalla señala el mérito y el mérito es un Honor que no paga la canasta familiar del artista, que de esposas y
ex esposas sabe tanto como el que más pero gana menos. El Premio al artista implica marcarlo al distinguirlo. Si es con Oro mejor y sino, que vengan las medallas, monedas de ocasión, pero que sean de Oro que valen lo que pesan.
O sea, que si el valor estético se paga con Oro no quieran pagarlo con Honor, que para sentir frío y honor al mismo tiempo hay que tener una Fe infinita en lo que uno hace.La Medalla dos siglos atrás, era un hito en la vida de un artista,era un escalón imprescindible en la escalera del escalafón académico, hoy ni se mencionan llegando a desaparecer el oficio de medallista. La medalla fue anatematizada por la
clase sacerdotal, y pensar que las llevan en el pecho millones de fieles y enamorados en todo el mundo.
Análisis: BB