viernes, 20 de agosto de 2010

La viuda del Artista



El Director del Museiom recibiendo a la viuda de un artista del Canon.
Dibujo realizado mediante el “Método Costera”.
Método que consiste en dibujar en el Bus en movimiento.En el Bus de la Costera Metropolitana que nos lleva a La Plata. Al llegar a destino se debe emprolijar el resultado.(Emprolijar es un verbo extraño, como empomar, y a juzgar por la viborita roja que les adjudica el corrector automático, no deben existir)
Autor: bb
Apuntes para una Teoría del Museo:
La Viuda del Artista.
El Artista es el mayor productor de viudas jóvenes y bonitas de la Historia. Se debe esto a su vida azarosa, a sus múltiples ensayos matrimoniales, a su tendencia a gozar la vida y la belleza, a ser un reverendo y obtuso tarado o, tal vez, a un
defecto profesional debido a la magnificada potencia del dispositivo de su sensibilidad. También suele producir viudas horribles cuando sus condiciones de supervivencia son más hostiles. Sea como sea en la época que sea, la desordenada
vida del Artista lo lleva a soluciones que no siempre son las mejores.
Los Artistas conforman un grupo de riesgo para las drogas, los divorcios,
el alcohol, los cuernos, la sífilis y otras enfermedades del reino de Venus.
Dentro de ese marco irregular y moralmente reprochable, el Artista al morir produce viudas, a veces una, a veces varias, a veces uno, a veces varios, como en el caso del Gordo Bergara Leumann. La viuda es quién posee la obra más íntima, el archivo, la información sensible para el Sacerdote Curador o Historiador que construirá el Dogma. La viuda certifica la obra que circula en el mercado como verdadera,
custodia los tirajes de las obras múltiples, denuncia y hace secuestrar las obras falsas, se reserva las mejores obras, las presta pero no se desprende de ellas hasta el final, le vende o dona la mejor al Museiom, tratando de que presida una Sala importante de la Cripta. La viuda, si posee mucha obra y puede gobernar a los hijos de todo tipo que le aparecen originados por el finado, la vende sin inundar el mercado, para no devaluar la cotización del Artista. Hay viudas que hacen esto y disfrutan de lo no disfrutado por el finado y hay otras que hacen cualquier cosa, como la viuda de Utrillo: llamada Lucie Valore, o sea, hasta en el apellido el problema, era una pintora sin ningún Valore que cedió sus derechos para expertizar la obra de su esposo muerto, a cambio de que el tramposo marchand Petrides,
le comprara regularmente cuadro suyos sin ningún Valore en el mercado. Ese Petrides le pagaba las pinturas a Utrillo con vino, ya que era un alcohólico desaforado. Había incluso un dicho que decía:“Un litro, un Utrillo, un litro, un Utrillo”.
La viuda de Utrillo una torpe y una tramposa, no así la madre de Utrillo, Suzanne Valadon, gran pintora bohemia, bebedora retratada por Tolouse-Lautrec, dibujada por Degas y Renoir,amante de varios de ellos pero bella y desnuda posando
para todos. Suzanne, la superviuda de los impresionistas.
bb